El potaje de vigilia es uno de los platos más emblemáticos de la Semana Santa en España. Su origen humilde y su sabor reconfortante lo han convertido en una receta imprescindible durante los días de abstinencia. En Legumbres Guillermo te enseñamos a prepararlo con ingredientes de calidad como nuestros garbanzos pedrosillanos y una combinación perfecta de bacalao, espinacas y huevo.
¿Qué es el potaje de vigilia?
Se trata de un guiso tradicional sin carne, preparado con garbanzos, bacalao, espinacas y huevo duro, ideal para los viernes de Cuaresma. Rico en proteína vegetal, fibra, minerales y con un sabor profundo, el potaje de vigilia es una receta saludable, nutritiva y llena de tradición.
Ingredientes para 4 personas
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250 g de garbanzos
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300 g de bacalao desalado y desmigado
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200 g de espinacas frescas
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2 huevos cocidos
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1 cebolla
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2 dientes de ajo
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1 hoja de laurel
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1 cucharadita de pimentón dulce
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Aceite de oliva virgen extra
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Sal al gusto
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Agua o caldo de verduras
Cómo preparar un potaje de vigilia paso a paso
1. El sofrito
En una cazuela con aceite de oliva, sofríe la cebolla picada y los ajos. Añade el pimentón cuando estén dorados, removiendo rápidamente.
2. Incorpora las espinacas
Agrega las espinacas frescas al sofrito. Cocina unos minutos hasta que se reduzcan y suelten parte de su agua.
3. Añade los garbanzos y el bacalao
Incorpora los garbanzos cocidos y el bacalao desmigado. Añade también la hoja de laurel y cubre con agua o caldo. Cocina a fuego medio durante 15-20 minutos.
4. Finaliza con el huevo duro
Justo antes de servir, incorpora los huevos cocidos cortados en mitades o rodajas. Remueve con cuidado y sirve bien caliente.
